Bienvenidas y bienvenidos a este rinconcito del internet donde la tierra huele a verdad, el aire sabe a calma y la sabiduría nace de los caminos polvosos del campo. Aquí habla Doña Lía, una mujer campesina de corazón ancho, manos trabajadas y lengua suelta pa’ decir las cosas como son… pero siempre con cariño, respeto y ese humito de ternura que cura heridas del alma.

Este canal nace de la necesidad de tener un espacio donde la voz sencilla, honesta y sin maquillaje de una mujer del pueblo pueda acompañar, aconsejar, abrazar y hacer reír a todas esas muchachas, muchachos y personas que a veces se sienten perdidas en su propio camino. Porque uno allá afuera ve mucho brillo, pero poca claridad; mucha apariencia, pero poca esencia. Y eso, mija, mijo… cansa el alma.