¿Te pasa que algo pequeño te activa… y de repente ya no eres tú?
Tu sistema nervioso no “exagera”. Está intentando protegerte. Pero cuando no sabemos cómo regularlo, entramos en un ciclo que se repite una y otra vez:
🔹 Algo te dispara (una mirada, un mensaje, un recuerdo). 🔹 Tu cuerpo entra en alerta sin pedir permiso. 🔹 Cambias de estado: lucha, huida, congelación, colapso o complacencia. 🔹 El cuerpo empieza a hablar: tensión, nudo, cansancio, ruido mental. 🔹 Intentas regularte… o tiras de escapes que solo tapan (pantallas, comida, trabajo, drama). 🔹 Sales del estado… o quedas atrapado en un bucle de activación.
Y no es tu culpa. Es biología. Es supervivencia. Es un sistema que necesita guía, no presión.
La buena noticia: 💛 Este ciclo se puede cambiar. 💛 Tu sistema nervioso puede aprender a volver a la calma. 💛 No necesitas hacerlo perfecto, solo aprender a escucharte.
Si quieres que te acompañe a regular tu sistema nervioso y empezar a sentir alivio real y sostenible, te leo en los comentarios o por mensaje.
El trauma complejo no solo deja huellas emocionales — mantiene tu sistema nervioso en un estado de alerta constante. Tu cuerpo vive en modo supervivencia incluso cuando “todo está bien”. Esa tensión crónica se traduce en ansiedad, insomnio, agotamiento o dificultad para relajarte.
Los ejercicios neurosomáticos ayudan a liberar ese estrés acumulado y a enseñar al cuerpo que ya no está en peligro. Cuando regulas tu sistema nervioso, dejas de vivir en lucha o huida, y empiezas a sentir calma, seguridad y conexión contigo misma.
✨ Sanar no es olvidar el pasado, es enseñarle al cuerpo que el presente es seguro.
El sistema nervioso no es lineal ni “elige un estado y ya”. Puede pivotar entre varias respuestas defensivas, sobre todo si hay un historial de trauma, estrés crónico o un sistema nervioso muy sensibilizado.
👉 Lo que suele pasar:
Muchas personas se mantienen en un “bucle” entre huida (hiperactivación: hago, hago, me distraigo) y congelación (colapso momentáneo: me bloqueo, no puedo).
Cuando estar en huida o congelación se vuelve insoportable, aparece la complacencia como estrategia: “si me adapto, si agrado, si no incomodo, quizás no habrá peligro”.
Se va transitando de uno a otro sin llegar a un estado de verdadera regulación (seguridad, calma, conexión).
En la práctica se ve así:
Escapas de una situación incómoda (huida).
Luego te quedas bloqueada, sin poder reaccionar (congelación).
Y después te “recuperas” agradando, adaptándote o cediendo (complacencia).
Esto no significa que estés “rota”, sino que tu sistema nervioso está usando estrategias de supervivencia aprendidas. Y mientras no hay sensación de seguridad interna, se puede vivir dando giros entre esas respuestas. #sistemanervioso#estréspostraumático#ansiedad
El sistema nervioso no es lineal ni “elige un estado y ya”. Puede pivotar entre varias respuestas defensivas, sobre todo si hay un historial de trauma, estrés crónico o un sistema nervioso muy sensibilizado.
👉 Lo que suele pasar:
Muchas personas se mantienen en un “bucle” entre huida (hiperactivación: hago, hago, me distraigo) y congelación (colapso momentáneo: me bloqueo, no puedo).
Cuando estar en huida o congelación se vuelve insoportable, aparece la complacencia como estrategia: “si me adapto, si agrado, si no incomodo, quizás no habrá peligro”.
Se va transitando de uno a otro sin llegar a un estado de verdadera regulación (seguridad, calma, conexión).
En la práctica se ve así:
Escapas de una situación incómoda (huida).
Luego te quedas bloqueada, sin poder reaccionar (congelación).
Y después te “recuperas” agradando, adaptándote o cediendo (complacencia).
Esto no significa que estés “rota”, sino que tu sistema nervioso está usando estrategias de supervivencia aprendidas. Y mientras no hay sensación de seguridad interna, se puede vivir dando giros entre esas respuestas. #sistemanervioso#estréspostraumático#ansiedad
Dolores de cabeza, tensión muscular o problemas gastrointestinales
Sensación de desesperanza o pérdida de motivación
Solución: EMDR funciona muy bien para el TEPT a nivel mental, somatic experiencing para trabajar el cuerpo con un terapeuta, y los ejercicios Neurosomáticos y los demás que están puestos en mis cursos sirven para ambos, físico y emocional de una forma de autoaplicación para el bienestar 😌
La ansiedad activa la amígdala, que dispara respuestas de alerta y mantiene el cuerpo en tensión. Al escribir a mano tus miedos, la información pasa a la corteza prefrontal, donde se procesa con lógica, reduciendo su intensidad y ayudando a calmar el sistema nervioso.
🖊️ Paso a paso:
Escribe qué miedo estás sintiendo ahora.
Anota por qué te causa tanto malestar.
Describe lo peor que podría pasar si sucede.
Escribe cómo actuarías si eso pasa.
Si quieres regular por completo tu sistema nervioso y aliviar la ansiedad, visita el link de mi perfil.
A veces nuestro cuerpo responde al estrés como si estuviera en guerra: atacamos y controlamos todo (lucha), corremos sin parar ni un segundo de calma (huida), nos dejamos llevar complaciendo a todos (adulación), nos rendimos y desconectamos (colapso), o nos quedamos paralizados y distraídos (congelación).
Estas respuestas son normales, pero cuando se repiten, nuestro sistema nervioso se desregula y perdemos bienestar.
Aquí es donde los ejercicios neurosomáticos hacen magia: ayudan a liberar tensión acumulada, reconectar con el cuerpo y devolvernos equilibrio emocional y físico.
Poco a poco, es posible recuperar calma, presencia y energía sin depender de nadie. Mira mi perfil
El trauma infantil no siempre es visible, pero deja huellas en el sistema nervioso. El trauma de choque ocurre en un momento concreto (abuso físico, sexual, accidentes, desastres, violencia presenciada). El trauma relacional o de desarrollo se repite en la infancia: negligencia, abandono, abuso emocional, inconsistencia en el apego o parentificación. A través de ejercicios neurosomáticos es posible liberar la información acumulada en el cuerpo y devolver al sistema nervioso su equilibrio natural, mejorando la regulación emocional y el bienestar
¿Sientes un cansancio que no se va aunque duermas bien? Puede ser fatiga crónica, un desequilibrio real que tu médico no siempre detecta en análisis. No estás perezosa ni exagerando: tu cuerpo está en modo supervivencia y necesita regulación.
La fatiga crónica afecta tu energía, concentración y ánimo. Pero hay métodos efectivos para recuperar tu vitalidad y claridad mental sin estrés ni complicaciones.
Si quieres empezar a transformar tu sistema nervioso desde casa, mi plan de regulación paso a paso está diseñado para ti. Sin prisas, con apoyo y resultados reales.
Cuando el cortisol se mantiene elevado, el cuerpo comienza a hablar en voz baja. No grita. No se manifiesta de golpe. Lo hace a través de signos sutiles, acumulativos, que muchas veces se pasan por alto. No se trata del síndrome de Cushing, sino de algo más silencioso: el hipercortisolismo funcional.
Una persona activa, que trabaja mucho, entrena fuerte y apenas descansa, puede sentir que lo tiene todo bajo control. Pero si se despierta todos los días a las 3 de la mañana sin razón aparente, eso no es casualidad. Es el reloj biológico respondiendo a un cortisol elevado crónico.
El músculo comienza a desaparecer sin explicación. Primero en los muslos, luego en los brazos. A pesar del ejercicio, hay pérdida de masa muscular que no se compensa. El catabolismo empieza a ganar terreno.
En las uñas aparecen líneas oscuras verticales. No duelen, pero ahí están. Es un marcador visible, muchas veces ignorado, del impacto del estrés crónico en la piel y el sistema tegumentario.
Tras comer, llega el bajón. No uno cualquiera: hipoglucemia postprandial. El azúcar en sangre cae, el cuerpo tiembla, aparece ansiedad y fatiga. El cortisol interfiere con la insulina, y el equilibrio se pierde.
Las encías retroceden. No hay gingivitis ni caries visibles, pero sí recesión gingival. Un tejido blando que se deteriora lentamente bajo el peso de un sistema nervioso hiperactivo.
Cada mes, reaparecen pequeños virus. Un resfriado. Un herpes labial. Una sensación constante de no estar al 100%. El cortisol alto suprime la inmunidad, especialmente la antiviral. No es debilidad, es un sistema sobrecargado.
Una taza de café se siente como un terremoto. Con solo un poco de cafeína llegan las palpitaciones. El cuerpo ya no tolera los estimulantes. La hipersensibilidad a la cafeína es una señal directa de sobreestimulación suprarrenal.
La piel se vuelve delgada. No es una estría, es fragilidad. Aparecen hematomas espontáneos, pequeños, en brazos o piernas, sin haber recibido un golpe. El colágeno sufre bajo el dominio del cortisol.
Decidir qué ropa ponerte en la mañana puede tomar media hora. No es indecisión, es fatiga cognitiva por cortisol elevado. El hipocampo se vuelve lento, el pensamiento se bloquea. La mente se cansa antes que el cuerpo.
Y cuando por fin todo se calma, llega el sudor. Estás quieto. Pero sudas. A veces en medio de la noche. Es el sistema simpático, activado sin tregua. El cortisol ya no sube: vive ahí.
La Loba Somática
¿Te pasa que algo pequeño te activa… y de repente ya no eres tú?
Tu sistema nervioso no “exagera”.
Está intentando protegerte.
Pero cuando no sabemos cómo regularlo, entramos en un ciclo que se repite una y otra vez:
🔹 Algo te dispara (una mirada, un mensaje, un recuerdo).
🔹 Tu cuerpo entra en alerta sin pedir permiso.
🔹 Cambias de estado: lucha, huida, congelación, colapso o complacencia.
🔹 El cuerpo empieza a hablar: tensión, nudo, cansancio, ruido mental.
🔹 Intentas regularte… o tiras de escapes que solo tapan (pantallas, comida, trabajo, drama).
🔹 Sales del estado… o quedas atrapado en un bucle de activación.
Y no es tu culpa.
Es biología. Es supervivencia. Es un sistema que necesita guía, no presión.
La buena noticia:
💛 Este ciclo se puede cambiar.
💛 Tu sistema nervioso puede aprender a volver a la calma.
💛 No necesitas hacerlo perfecto, solo aprender a escucharte.
Si quieres que te acompañe a regular tu sistema nervioso y empezar a sentir alivio real y sostenible, te leo en los comentarios o por mensaje.
1 month ago | [YT] | 1
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La Loba Somática
El trauma complejo no solo deja huellas emocionales — mantiene tu sistema nervioso en un estado de alerta constante.
Tu cuerpo vive en modo supervivencia incluso cuando “todo está bien”.
Esa tensión crónica se traduce en ansiedad, insomnio, agotamiento o dificultad para relajarte.
Los ejercicios neurosomáticos ayudan a liberar ese estrés acumulado y a enseñar al cuerpo que ya no está en peligro.
Cuando regulas tu sistema nervioso, dejas de vivir en lucha o huida, y empiezas a sentir calma, seguridad y conexión contigo misma.
✨ Sanar no es olvidar el pasado, es enseñarle al cuerpo que el presente es seguro.
2 months ago | [YT] | 4
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La Loba Somática
El sistema nervioso no es lineal ni “elige un estado y ya”. Puede pivotar entre varias respuestas defensivas, sobre todo si hay un historial de trauma, estrés crónico o un sistema nervioso muy sensibilizado.
👉 Lo que suele pasar:
Muchas personas se mantienen en un “bucle” entre huida (hiperactivación: hago, hago, me distraigo) y congelación (colapso momentáneo: me bloqueo, no puedo).
Cuando estar en huida o congelación se vuelve insoportable, aparece la complacencia como estrategia: “si me adapto, si agrado, si no incomodo, quizás no habrá peligro”.
Se va transitando de uno a otro sin llegar a un estado de verdadera regulación (seguridad, calma, conexión).
En la práctica se ve así:
Escapas de una situación incómoda (huida).
Luego te quedas bloqueada, sin poder reaccionar (congelación).
Y después te “recuperas” agradando, adaptándote o cediendo (complacencia).
Esto no significa que estés “rota”, sino que tu sistema nervioso está usando estrategias de supervivencia aprendidas. Y mientras no hay sensación de seguridad interna, se puede vivir dando giros entre esas respuestas.
#sistemanervioso #estréspostraumático #ansiedad
3 months ago | [YT] | 2
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La Loba Somática
El sistema nervioso no es lineal ni “elige un estado y ya”. Puede pivotar entre varias respuestas defensivas, sobre todo si hay un historial de trauma, estrés crónico o un sistema nervioso muy sensibilizado.
👉 Lo que suele pasar:
Muchas personas se mantienen en un “bucle” entre huida (hiperactivación: hago, hago, me distraigo) y congelación (colapso momentáneo: me bloqueo, no puedo).
Cuando estar en huida o congelación se vuelve insoportable, aparece la complacencia como estrategia: “si me adapto, si agrado, si no incomodo, quizás no habrá peligro”.
Se va transitando de uno a otro sin llegar a un estado de verdadera regulación (seguridad, calma, conexión).
En la práctica se ve así:
Escapas de una situación incómoda (huida).
Luego te quedas bloqueada, sin poder reaccionar (congelación).
Y después te “recuperas” agradando, adaptándote o cediendo (complacencia).
Esto no significa que estés “rota”, sino que tu sistema nervioso está usando estrategias de supervivencia aprendidas. Y mientras no hay sensación de seguridad interna, se puede vivir dando giros entre esas respuestas.
#sistemanervioso #estréspostraumático #ansiedad
3 months ago | [YT] | 2
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La Loba Somática
Síntomas de una persona con estrés postraumático (TEPT)
1. Reexperimentación del trauma
Recuerdos intrusivos y recurrentes del evento traumático
Pesadillas relacionadas con el trauma
Flashbacks (sensación de que el evento está ocurriendo otra vez)
Reacciones físicas o emocionales intensas ante recordatorios del trauma
2. Evitación
Evitar lugares, personas, conversaciones o situaciones que recuerden el trauma
Evitar pensar o hablar sobre el evento traumático
Evitación de actividades o intereses que antes eran placenteros
3. Alteraciones en el estado de ánimo y pensamientos
Sentimientos persistentes de culpa, vergüenza o culpa exagerada
Sentimientos de desapego o aislamiento social
Pérdida de interés en actividades que antes eran disfrutables
Dificultad para recordar partes importantes del trauma
4. Hiperactivación y reactividad aumentada
Irritabilidad o estallidos de ira
Dificultad para dormir o mantener el sueño
Dificultad para concentrarse
Hipervigilancia (estar constantemente “en alerta”)
Sobresaltos exagerados
5. Síntomas físicos y emocionales asociados
Ansiedad intensa o ataques de pánico
Depresión o tristeza profunda
Dolores de cabeza, tensión muscular o problemas gastrointestinales
Sensación de desesperanza o pérdida de motivación
Solución: EMDR funciona muy bien para el TEPT a nivel mental, somatic experiencing para trabajar el cuerpo con un terapeuta, y los ejercicios Neurosomáticos y los demás que están puestos en mis cursos sirven para ambos, físico y emocional de una forma de autoaplicación para el bienestar 😌
3 months ago (edited) | [YT] | 2
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La Loba Somática
La ansiedad activa la amígdala, que dispara respuestas de alerta y mantiene el cuerpo en tensión. Al escribir a mano tus miedos, la información pasa a la corteza prefrontal, donde se procesa con lógica, reduciendo su intensidad y ayudando a calmar el sistema nervioso.
🖊️ Paso a paso:
Escribe qué miedo estás sintiendo ahora.
Anota por qué te causa tanto malestar.
Describe lo peor que podría pasar si sucede.
Escribe cómo actuarías si eso pasa.
Si quieres regular por completo tu sistema nervioso y aliviar la ansiedad, visita el link de mi perfil.
neurosomaticos.com/ansiedad
3 months ago | [YT] | 3
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La Loba Somática
A veces nuestro cuerpo responde al estrés como si estuviera en guerra: atacamos y controlamos todo (lucha), corremos sin parar ni un segundo de calma (huida), nos dejamos llevar complaciendo a todos (adulación), nos rendimos y desconectamos (colapso), o nos quedamos paralizados y distraídos (congelación).
Estas respuestas son normales, pero cuando se repiten, nuestro sistema nervioso se desregula y perdemos bienestar.
Aquí es donde los ejercicios neurosomáticos hacen magia: ayudan a liberar tensión acumulada, reconectar con el cuerpo y devolvernos equilibrio emocional y físico.
Poco a poco, es posible recuperar calma, presencia y energía sin depender de nadie. Mira mi perfil
4 months ago | [YT] | 2
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La Loba Somática
El trauma infantil no siempre es visible, pero deja huellas en el sistema nervioso. El trauma de choque ocurre en un momento concreto (abuso físico, sexual, accidentes, desastres, violencia presenciada). El trauma relacional o de desarrollo se repite en la infancia: negligencia, abandono, abuso emocional, inconsistencia en el apego o parentificación.
A través de ejercicios neurosomáticos es posible liberar la información acumulada en el cuerpo y devolver al sistema nervioso su equilibrio natural, mejorando la regulación emocional y el bienestar
4 months ago | [YT] | 1
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La Loba Somática
¿Sientes un cansancio que no se va aunque duermas bien? Puede ser fatiga crónica, un desequilibrio real que tu médico no siempre detecta en análisis. No estás perezosa ni exagerando: tu cuerpo está en modo supervivencia y necesita regulación.
La fatiga crónica afecta tu energía, concentración y ánimo. Pero hay métodos efectivos para recuperar tu vitalidad y claridad mental sin estrés ni complicaciones.
Si quieres empezar a transformar tu sistema nervioso desde casa, mi plan de regulación paso a paso está diseñado para ti. Sin prisas, con apoyo y resultados reales.
linktr.ee/lalobasomatica
4 months ago | [YT] | 2
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La Loba Somática
Cuando el cortisol se mantiene elevado, el cuerpo comienza a hablar en voz baja. No grita. No se manifiesta de golpe. Lo hace a través de signos sutiles, acumulativos, que muchas veces se pasan por alto. No se trata del síndrome de Cushing, sino de algo más silencioso: el hipercortisolismo funcional.
Una persona activa, que trabaja mucho, entrena fuerte y apenas descansa, puede sentir que lo tiene todo bajo control. Pero si se despierta todos los días a las 3 de la mañana sin razón aparente, eso no es casualidad. Es el reloj biológico respondiendo a un cortisol elevado crónico.
El músculo comienza a desaparecer sin explicación. Primero en los muslos, luego en los brazos. A pesar del ejercicio, hay pérdida de masa muscular que no se compensa. El catabolismo empieza a ganar terreno.
En las uñas aparecen líneas oscuras verticales. No duelen, pero ahí están. Es un marcador visible, muchas veces ignorado, del impacto del estrés crónico en la piel y el sistema tegumentario.
Tras comer, llega el bajón. No uno cualquiera: hipoglucemia postprandial. El azúcar en sangre cae, el cuerpo tiembla, aparece ansiedad y fatiga. El cortisol interfiere con la insulina, y el equilibrio se pierde.
Las encías retroceden. No hay gingivitis ni caries visibles, pero sí recesión gingival. Un tejido blando que se deteriora lentamente bajo el peso de un sistema nervioso hiperactivo.
Cada mes, reaparecen pequeños virus. Un resfriado. Un herpes labial. Una sensación constante de no estar al 100%. El cortisol alto suprime la inmunidad, especialmente la antiviral. No es debilidad, es un sistema sobrecargado.
Una taza de café se siente como un terremoto. Con solo un poco de cafeína llegan las palpitaciones. El cuerpo ya no tolera los estimulantes. La hipersensibilidad a la cafeína es una señal directa de sobreestimulación suprarrenal.
La piel se vuelve delgada. No es una estría, es fragilidad. Aparecen hematomas espontáneos, pequeños, en brazos o piernas, sin haber recibido un golpe. El colágeno sufre bajo el dominio del cortisol.
Decidir qué ropa ponerte en la mañana puede tomar media hora. No es indecisión, es fatiga cognitiva por cortisol elevado. El hipocampo se vuelve lento, el pensamiento se bloquea. La mente se cansa antes que el cuerpo.
Y cuando por fin todo se calma, llega el sudor. Estás quieto. Pero sudas. A veces en medio de la noche. Es el sistema simpático, activado sin tregua. El cortisol ya no sube: vive ahí.
#cortisolelevado #estrescronico #hipercortisolismo #sintomascortisolalto #disfuncionadrenal #saludhormonal #ejesuprarrenal #estresfisiologico #saludintegral #biologiadelestres
5 months ago (edited) | [YT] | 0
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